Entonces el loro fue a buscar algún
remedio y encontró una planta medicinal que la llevó a Martín. Cuando el conejo
se puso mejor, empezaron a jugar por el bosque, comieron ricos frutos, pasearon
alimentándose de algunas flores. Ahí se hicieron amigos de un caracol y fueron
juntos hasta llegar a un río llamado El Tragadero, donde hay muchas truchas.
El conejo Martín y el caracol, se
refrescaron en el río mientras el loro iba a volar por el bosque, de repente
apareció una serpiente muy astuta que atrapó a los dos amigos. Pero un águila
vio todo lo que ocurrió y agarró a la serpiente picándole la cola. Pero el
águila no los salvó, alejó a la serpiente y tomó de presa nuevamente al conejo
Martín y el pequeño caracol. “Ahora ustedes serán mi presa y me los voy a
comer”, dijo el águila.
Pero apareció el loro y dijo:
“Suelta a mis amigos de una vez, sino verás lo poderoso que soy”.
- ¡Ahora veremos!-, dijo el águila. El loro voló hasta la trampa que él había hecho rápidamente y el águila que lo seguía cayó y quedó atrapado de las patas. Así el loro fue a rescatar a sus amigos.
Finalmente, los tres nuevos amigos,
celebraron con un baile con todas las aves. Y fueron nombrados como héroes en
toda la selva.- ¡Ahora veremos!-, dijo el águila. El loro voló hasta la trampa que él había hecho rápidamente y el águila que lo seguía cayó y quedó atrapado de las patas. Así el loro fue a rescatar a sus amigos.
Autor: Cristian Omar Rodas Villoslada
¡ hay ! mira autor:cristian omar rodas villoslada este cuento s el mas aburrido, feo y corto del mundo q asco has algo mejor
ResponderEliminarEsta chevere me gusta. .
ResponderEliminarMe gusto el cuento porque me sirvió para una tarea de artística.
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